Una nueva ley aumentará la edad mínima a la cual los menores pueden ser detenidos y limitarán la detención en ciertas situaciones donde el menor no es acusado de un crimen violento, aclarando que el estado hace una prioridad la rehabilitación y atiende la causa raíz del comportamiento delictivo. Primero, aumenta la edad en la cual un menor puede ser detenido, de 10 años a 12 años de edad en el 2026 y después a 13 años – en algunas situaciones – en el 2027. Bajo la ley, el arresto solo será usado como último recurso y bajo estrictas condiciones y los menores serán detenidos solo si hay causa probable para creer que son delincuentes y que es necesaria la detención urgente e inmediata, o si han dejado de aparecer repetidas veces a audiencias programadas. La nueva ley creará también un programa de recursos a crímenes no violentos, facilitado por el Departamento de Justicia Juvenil, para proveer recursos a menores declarados delincuentes por crímenes no violentos. Los recursos incluirían tutoría, recursos educativos, oportunidades de entrenamiento de empleo, servicios de salud conductual y más. El Proyecto 3492 de la Cámara fue convertido en ley el viernes. Entra en efecto el 1º de junio del 2026 – con provisiones sobre el programa de recursos de crímenes juveniles no violentos, y entra en efecto el 1º de enero del 2028.