Por: Ashmar Mandou
Fundada en 1978 por el Diácono Thomas Bresler, Ayuda para la Mujer es una organización sin fines de lucro que ofrece una variedad de servicios a las mujeres que enfrentan embarazos no planificados.
“Muchas de las mujeres que pasan por nuestras puertas están a menudo asustadas y solas”, dijo Francés Jiménez, directora del proyecto/coordinadora voluntaria del programa. “Estas mujeres, ya sea que estén en sus años 40 o en la adolescencia, tienen tantas preguntas, pero no saben a dónde acudir para obtener ayuda. Ahí es donde la Ayuda para la Mujer entra.”
Con oficinas en el Centro, en Des Plaines, y ahora Berwyn, Ayuda para la Mujer tiene por objeto capacitar y educar a las madres-a-ser sobre otras alternativas al aborto a través de programas de tutoría, consejería, referencias médicas y comunitarias, programa residencial, y apoyo emocional. “Es extremadamente importante que las mujeres se sienten como si estuvieran caminando en un ambiente seguro y amoroso”, dijo Adriana Paniagua Morales, Coordinador de la localidad de Berwyn, que tornó a Ayuda para la Mujer hace varios años cuando ella atravesaba su propio embarazo en la adolescencia. “Puedo hablar por experiencia personal que cada uno de los miembros de Ayuda para la Mujer está aquí para trabajar con estas madres paso a paso. Estamos aquí para responder a todas las preguntas, vamos a proporcionar todos los recursos que podamos, y estamos aquí, simplemente para quitar el estrés y la carga emocional que estas mujeres sienten.”
Basado en favor de las enseñanzas de vida de la Iglesia Católica, las mujeres, que se encuentran en situaciones de embarazo difícil, se emparejan con una algún consejero de Ayudas a la Mujer y reciben una abundante cantidad de información que van desde el asesoramiento de adopción a la información sobre planificación familiar natural a servicios de seguimiento, hasta recursos de ropa y albergues. “Algunas mujeres carecen de información adecuada y se sienten cuando experimentan un embarazo no planeado que sus opciones son limitadas”, dijo Jiménez. “Ayuda para la Mujer se puede describir como un centro de recursos único para las mujeres embarazadas que necesitan información y un gran equipo de apoyo.”
Dos servicios Jiménez y Paniagua están más orgullosos son el de “boutique de bebé”, lleno de suministros donados, tales como ropa para niños, biberones, pañales y juguetes, así como ayuda para la Casa Heather de Ayuda para la Mujer, su primer centro residencial diseñado para ofrecer a las mujeres albergue y seguridad para tener a su hijo. “A veces estas jóvenes que vienen con nosotros las han corrido de sus hogares o voluntariamente se han ido porque ellas creen que han decepcionado a sus padres”, dijo Paniagua. “Mientras en la Casa Heather, consejeros trabajan con estas jóvenes para mantenerlas al día con sus estudios y les enseñan habilidades importantes de la vida para que sean madres auto-suficientes.” Casa Heather proporciona un lugar donde las mujeres y sus bebés pueden quedarse hasta dos años mientras trabajaban de cerca con sus mentores.
Todos los servicios de Ayuda a la Mujer son gratuitos y confidenciales. Jiménez y Paniagua se aseguran que todas las mujeres que visitan Ayuda para la Mujer recibirán la atención y compasión más alta en todo el proceso. En la actualidad, Ayuda para la Mujer está buscando voluntarios bilingües, preferentemente inglés y español, quienes puedan trabajar con algunas de las jóvenes de habla española. Si usted desea ser voluntario o solicitar información sobre los servicios de Ayuda a la Mujer, visite www.helpaidforwomen.org o envíe un correo electrónico a Jiménez, al fjimenez@aidforwomen.org. También puede llamar a la ubicación de Berwyn, al 708-795-6000 o visite su lugar, en 3240 S. Oak Park Ave.
