Consejos para Empezar a Sanar tu Vida

Lawndale News Chicago's Bilingual Newspaper - Salud

Descuido. Abuso. Divorcio. Adición. Estas son solo unas cuantas de las experiencias de la vida que pueden dejar a los niños emocionalmente lesionados o peor, causando que algunos desarrollen apariencia y comportamiento disfuncional que los condena a la auto-victimización cuando adultos. “No solo perpetuamos, sino que protegemos los obstáculos que se presentan en la vida de nuestra sanación y felicidad”, dice Marta Maranda. Autora de “What it Looks like” [Lo que Parece] nueva memoria detallando su viaje de sanación, Maranda dice que continúa usando los mecanismos de defensa que desarrolló en respuesta al trauma de su niñez y bastante adentrada en la edad adulta, que solo le sirvieron para bloquear un crecimiento emocional saludable. Ofrece estos consejos para otros cuyo pasado trauma haya dado como resultado pensamientos autodestructivos y patrones de comportamiento como el deseo de permanecer en relaciones dañinas o recurrir a atenuantes como la comida, las drogas o el alcohol para suavizar sus emociones dolorosas.

*Busca razones dentro de ti, no busques la culpa afuera.
Es fácil encontrar a otras personas o situaciones para culpar tus problemas. Aún cuando el trauma inicial haya sido infligido cuando tu eras más vulnerable y por álguien en quien tu deberías poder confiar, en algún momento tienes que tomar la responsabilidad por tu propia vida. “¿Cómo estás contribuyendo tu con la disfuncionalidad de tu vida?” pregunta Maranda. “La decisión de permanecer hundida en una vida disfuncional es tuya. La responsabilidad de buscar la sanación y la felicidad es también tuya”.

*Si es tu culpa, admítelo.
Mira sin temor lo que has hecho mal, al dolor que has provocado en ti y en otros por tu propio comportamiento disfuncional y admítelo. “Solo aceptándolo puedes cambiarlo”, dice Maranda. “Y solo a través del cambio puedes sanar”. “Igualmente, mira con amabilidad y humildad lo bueno que has hecho. Valora todo lo valioso que tienes y básate en eso.

*Establece un sistema de apoyo.
Nadie lo dijo mejor que Einstein: No puedes arreglar un problema con la misma mente fragmentada que lo creaste. Déjalo a la suerte, mucha gente que está convencida de que necesita cambiar sigue buscando ambientes que apoyen sus disfunciones en vez de fortalecer su sanación. “Cambiar es difícil y sanar no siempre es cómodo”, dice Maranda. “Por eso la gente muchas veces regresa a lo que conoce, aún si lo que conoce es destructivo o mortal”. Busca un sistema de apoyo en personas – ya sean amigos o familiares, o de una comunidad espiritual terapéutica – cuyas perspectivas te saquen de tu zona de confort y lejos de la disfunción que sabes es esencial para tu sanación.

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