Aunque todos quieren sentirse especiales cuando asisten a una fiesta en la casa de un amigo o familiar, pocas personas desean sentirse aisladas porque tienen diabetes. Y siendo que el 13.2 por ciento de los afroamericanos de más de 20 años han sido diagnosticados con esta condición – incluyendo el 11 por ciento de los residentes no blancos de Illinois y 10.2 por ciento de la población hispana del estado – lo más probable es que álguien con diabetes esté entre su lista de invitados de su próxima parrillada. “Las personas con diabetes tienen que tener cuidado con lo que comen porque toman medicina y necesitan tener cuidado con la cantidad de carbohidratos que comen cada día”, dice Rosie Bernard, enfermera registrada y educadora de la diabetes en Advocate Trinity Hospital en Chicago. “Planear una comida sabrosa, buena para la diabetes en su próxima reunión, mostrará a sus invitados que el hábito de comer saludables no tiene que ser aburrido. Y lo más probable es que atienda otras restricciones dietéticas que algunos de sus invitados tienen pero que no se atreven a mencionar”. Bernard ofrece los siguientes consejos para ayudarle a planear una fiesta buena para la diabetes, que todos los invitados pueden disfrutar:

Ofrezca una bebida buena para todos. Haga una provisión de café o té y endúlcelo ligeramente (mientras aún está caliente) con una pequeña cantidad de azúcar pura o un substituto de azúcar de bajas calorías, después guárdelo en su refrigerador. Poco antes de que lleguen los invitados, coloque una estación de bebidas surtida, con mucho hielo, una licuadora y jaras de té/café/frío. Asegúrese de añadir substitutos de azúcar, si lo desean más dulce, canela, polvo de cocoa, fruta y cualquier cosa más que los invitados quieran agregar. Diviértase viéndoles preparar y licuar sus propias bebidas.

Que los platos con vegetales sean el inicio de su menú. Muestre a sus invitados que sus destrezas de cocina más allá de carner ahumadas, incluyendo varios platillos con base de plantas en su buffet. Las verduras sazonadas y asadas a la parrilla tienen un sabor delicioso. Son de chuparse los dedos en ensaladas, pero recuerde poner aderezos ligeros.

Prepare los bocadillos. La mitad de la diversión de las parrilladas es esperar por ellas. Pero la gente que necesita tomar medicina con la comida y a una hora fija, el esperar hasta que la parrillada esté lista puede interferir con su salud. Para quitar esta preocupación de sus invitados, tenga ricos bocadillos desde que sus primeros invitados lleguen hasta que el útimo se vaya.

Comparta su plan de comida por adelantado. Cuando invite a sus amigos déjeles saber lo que hay en el menú y la hora en que va a servirse la comida. Esto no solo les ayudará a estar tranquilos, sino que evitará que se presenten con el estómago lleno porque comieron antes de ir a la fiesta.