Al aumentar la poiblación de garrapatas y extenderse por todo el país, su prevalencia aumenta el riesgo público de algunas molestas enfermedades. De estas enfermedades, dicen dermatólogos de American Academy of Dermatology, la enfermedad de Lyme, la fiebre manchada de Rocky Mountain, el virus Powassan y el síndrome alpha-gal – una alergia misteriosa a la carne roja – están entre las más graves. Para quitar una garrapata, el Dr. Lindsay Strowd, MD, FAAD, recomienda lo siguiente:

Use unas pinzas para quitar la garrapata. Esterilice la punta de las pinzas usando alcohol y agarre la garrapata tan cerca de la piel como le sea posible.

Jale lentamente hacia afuera. Evite retorcer, apretar o partir la garrapata ya que esto puede hacer que su cabeza o su boca se rompan y se queden en su piel. Si esto sucede, use las pinzas para sacar las partes restantes. Si no puede sacar el resto de la garrapata, vea a un dermatólogo certificado.

Deshágase de la garrapata. Colóquela en una bolsa o contenedor cerrado; sumerja la garrapata en alcohol; o envuélvala en una cinta adhesiva. Puede guardar la garrapata en un frasco sellado. De esa forma, si desarrolla algún síntoma después de la picadura, se le puede hacer una prueba a la garrapata.

Limpie el área afectada con agua y jabón

Para prevenir picaduras, el Dr. Strowd recomienda lo siguiente:

Camine en el centro de los senderos. Evite caminar en bosques muy cerrados con mucha vegetación.

Si tiene que caminar por áreas con mucha vegetación, vista pantalones largos y camisa de manga larga. Súbase los calcetines sobre los pantalones y ponga la camisa dentro de los pantalones para evitar que las garrapatas suban por su cuerpo. También es una buena idea vestir ropa de colores claros para que las garrapatas puedan verse con facilidad.

Use repelente de insectos que contenga de 20 a 30 por ciento DEET en la piel expuesta o la ropa. Asegúrese de seguir las instruccione del producto. Los padres deben aplicar este producto a sus hijos, teniendo cuidado de evitar ponerlo en manos, ojos y boca.

Examine su piel después de haber pasado un tiempo en áreas con mucha vegetación. Revise su cuerpo y asegúrese de no tener ninguna garrapata. Como las garrapatas prefieren el calor y las áreas húmedas, revise sus axilas, las ingles y el cabello. Revise también a sus niños y mascotas y cualquier ropa o utensilio que haya usado fuera.