El antojo por la comida, el intenso deseo de comer ciertos alimentos puede hechar a perder los esfuerzos por mantener hábitos de comida saludable y el peso del cuerpo, sin importar la época del año. Sin embargo, un examen de 28 estudios científicos actuales, revisados por compañeros, corrobora ampliamente los hallazgos de que los cambios en la dieta, las medicinas con receta, la actividad física y la cirugía bariátrica reducen el antojo, dice Candice Myers, PhD, profesora asistente – de investigaciones en LSU’s Pennington Biomedical Research Center. Por ejemplo, una forma probada de reducir el deseo por cierto alimento es comerla menos frecuentemente. En otras palabras, es mejor quitar algo de su dieta que tratar de comer porciones más pequeñas de ella. Otros comentarios de su revisión incluyen que: perder peso reduce el antojo por la comida. Tenga cuidado, el ejercicio puede aumentar el antojo. El antojo es el culpable de tanto como el 11 por ciento del comportamiento alimenticio y el aumento de peso, más de lo que lo explica la genética Muchas medicinas que producen obesidad – phentermine, lorcaserin, semaglitude y liraglitude entre otras – reducen el antojo. Diferentes grupos demográficos y socioeconómicos pueden tener diferentes respuestas al antojo por la comida. Pero poco se sabe sobre estas potenciales diferencias y se necesitan mayores investigaciones.