Un creciente número de adultos más jóvenes de E.U., están siendo hospitalizados a causa de una embolia, sugiere un nuevo estudio, lo que sucede, en parte, porque muchos de ellos tienen altos factores de riesgo, como alta presión arterial, obesidad y diabetes. El tipo de embolia más común, conocido como embolia isquémica, ocurre cuando un coágulo bloquea una arteria que lleva sangre al cerebro. Cuando los investigadores examinaron los datos de cuentas de hospital sobre hospitalizaciones por embolia isquémica aguda en adultos menores de 65 años, del 2003 al 2012, encontraron que los mayores índices de embolia se reportaban en adultos de 35 a 44 años. Durante el período de estudio, las hospitalizacione por embolia en el grupo de esa edad se elevaron un 42 por ciento en los hombres y 30 por ciento en las mujeres, reportan lo sinvestigadores en JAMA Neurology. La proporción de la gente con por lo menos de tres a cinco factores de riesgo por embolia – alta presión arterial, diabetes, colesterol alto, obesidad y tabaquismo – se elevó en los grupos de todas las edades, pero se elevó más, casi duplicándose, en adultos de 35 a 44 años. “Los altos y crecientes índices de factores de riesgo de embolia entre adultos jóvenes es preocupante y probablemente contribuya con el tiempo al aumento de hospitalizaciones por embolia”, dijo la autora del estudio Dra. Mary George del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades en Atlanta.

Al final del período de estudio, aproximadamente el 47 por ciento de hombres y el 48 por ciento de mujeres de 55 a 65 años hospitalizados durante el estudio tenían por lo menos tres factores de riesgo. Eso comparado al 35 por ciento de hombres y el 32 por ciento de mujeres entre 35 y 44 años. En ese grupo de edad más joven, el 66 por ciento de hombres y el 57 por ciento de mujeres tenían presión arterial alta al final del estudio, aproximadamente 48 por ciento de hombres y 38 por ciento de mujeres tenían los llamados desórdenes lípidos, como el colesterol alto y 42 por ciento de hombres y el 36 por ciento de mujeres. fumaban. Una limitación del estudio es que los investigadores no pudieron examinar la severidad o causa de la embolia, hacen notar los autores. También les faltaron datos sobre algunos factores de riesgo que pueden influenciar en las probabilidades de la embolia, como historial familiar o el uso de medicaciones basadas en estrógenos. También es posible que el aumento de embolias entre adultos jóvenes pueda explicarse en parte a los cambios en como se diagnostica una embolia, dice el Dr. James Burke, autor de una editorial acompañante e investigador de neurología en la Universidad de Michigan y Ann Arbor VA System. Aun cuando los índices de obesidad aumentan, la magnitud del cambio durante el período de estudio fue pequeño y la obesidad es un factor débil de riesgo para la embolia, dijo Burke. A la inversa, la hipertensión es generalmente el factor de riesgo más alto y más ampliamente reconocido y agresivamente tratado durante el período de estudio, agregó Burke. “Así que, aunque no podría descartar un aumento en los factores de riesgo convencionales que llevan a un aumento en las embolias en los jóvenes, si los índices verdaderamente siguen en aumento, lo que puedo pensar es que existen otras razones aparte de los factores de riesgo clásicos”, dijo Burke.